El viaje alrededor del mundo de la serie de Zurbarán “Jacob y sus doce hijos” sirve de hilo conductor para adentrarnos en la vida y la obra de uno de los titanes del barroco español, a la vez que descubrimos la peculiar historia de esta serie. Tras exponerse en Dallas, Nueva York y Jerusalén, las pinturas regresan al Castillo de Auckland como alma de un proyecto que busca la regeneración de esa zona en el Noreste de Inglaterra.